Un rincón donde esconderme

Escribir, escapar, mostrar y recordar.

10/21/2006

Soledad, putadas y amor.

Anoche, mientras estaba en el tren volviendo para casa reflexioné. No se si eran los efectos del alcohol, el hecho de no dormir, el cansancio, el humo o qué cojones era, pero la cuestión es que me ralle muchísimo. Me daba rabia no tener a nadie con quien hablar. Haber estado la noche entera bailando al lado de unos semi-desconocidos, haber deseado sentirme por un puto maldito instante un poco diferente a los demás. No ser otro borracho más que estaba en la multitud... no digo que sea diferente a los demás (no voy a negar los efectos del alcohol), pero joder macho, que rabia que me da que haya quién si que tubo compañía. No se ni si había alguien que valiese la pena de conocer, ni si nadie tenía un poco de conversa, pero la verdad es que me hubiese gustado comprobarlo. Por no querer, esta noche no quería ni ligar, quería conocer gente, pero nada, ni eso... Que pocos huevos que tengo... Ni con 6 cubatas me atrevo a presentarme a una pava. Imagínate si no bebo nada. El alcohol, quieras o no, te hace tener menos miedo al ridiculo (que no poco) y yo que no me atrevo ni a mantener la mirada a una pava...
Me cago en dios...
Me siento tan ridiculo.
A tomar por culo!